Según el periódico El Mundo, los
sistemas educativos tradicionales sufrirán profundas modificaciones motivadas por
la revolución tecnológica. Internet va a convertir los
colegios en «entornos interactivos» que pondrán patas arriba las formas
tradicionales de aprendizaje y cambiarán la manera de ser de docentes, padres y
estudiantes.
Las clases magistrales desaparecerán y el profesor además de ejercer como transmisor
de conocimientos, tendrá como principal misión guiar al
alumno a través de
su propio proceso de aprendizaje. El currículo estará personalizado en función de las necesidades educativas
de cada estudiante y se valorarán las habilidades personales y prácticas más que los contenidos académicos. Finalmente las escuelas serán el lugar
donde los alumnos interactuarán entre ellos y con el profesor quien les
ofrecerá un feedback de forma que se produzca un aprendizaje colaborativo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario